Rap sin cuenta 2023

Estos discos, temas y artistas del rap en español llamaron nuestra atención durante el año que pasó.

Santiago Cembrano
Lenguaje Roto

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Ilustración por Gavilán — @gavilanseis

Ya saben cómo va esto. Nos juntamos escritores y periodista de América Latina y España para reflexionar sobre lo que más nos gustó del rap durante el 2023. Pasen a leer y a escuchar

Abhir Hathi — Brown Boy

La palabra “evolución” es una de las más utilizadas (y es uno de los lugares más comunes del periodismo musical) para encubrir la falta de capacidad de análisis o criterio para describir o hablar de un álbum o una canción. Pero en el caso de Abhir, el término cobra todo el sentido. Significado y significante se entrelazan en BROWN BOY, el segundo álbum de estudio del artista de origen indiocanario.

Abhir Hathi (ahora simplemente conocido como Abhir), empezó como un rapero/cantante que traía al español los sonidos e influencias del R&B/rap que popularizaron en su momento PARTYNEXTDOOR, Drake o The Weeknd. Pero Abhir se cansó de eso y decidió tirar todo por la borda, ir a terapia y encontrarse a sí mismo.

Partiendo del reconocimiento de sus raíces y la historia de su familia, BROWN BOY es uno de los proyectos musicales más vanguardistas del año. De inicio a fin, existe una congruencia conceptual desde la instrumentación, donde destacan los ecos de la cultura hindú y árab, hasta en los versos. Así como frontea de su talento en tracks como “BANGLADESH”, se vulnera en “BOMBAY A LAS PALMAS” y expresa el mal colectivo que atañe constantemente a la generación que vive bajo la premisa de que es posible vivir de los sueños: Lifestyle crazy, pero sabes que algo te va a golpear cuando le frenes / Por eso nunca freno, me dicen “Cógete un break” / Y siempre respondo: “No puedo” / Perdiéndome cosas, me repito “¿No es esto lo que querías?”

Abhir hace un trabajo impecable a la hora de sacar del banquillo a los artistas de las Islas Canarias que lo acompañan: Quevedo, probablemente el canario más popular de nuestros tiempos, deja como testigo la influencia de la camada : “Los menores quieren ser cantantes, ya no traficantes”. Así refuerza la narrativa que presentó también en “Sangre Y fe” de Me Muevo Con Dios de Cruz Cafuné: “Canaria es la nueva Masía”, en relación con la cantera del Fútbol Club Barcelona. Hablando de Cruzzi, el capitán del equipo saca la casta en “HOTTEST.YOUNG.MEN.in.BIZNESS” y tira una de las barras más ingeniosas y al mismo tiempo la maldición de la industria musical: “Tu vaina es estar firmado con otro firmado / De algún modo siempre acabas currando pa’ Five Guys”.

Abhir dejó de ser este 2023 un rookie o un artista interesante, para convertirse en el MVP de la temporada. No hay duda, empezó la BROWN BOY SZN.

— Héctor Elí

Adriano Danzziani — “Mantenlo” (prod. Onthervn)

No conocía a Adriano Danzziani antes de darle play a su disco LINGOTTI. La primera canción estuvo bien, pero cuando la segunda empezó con un contundente “Hablais de delitos en canciones y está guapo / Pero solo hay dos opciones / O es mentira o eres tonto”, me acomodé en mi silla como si estuviera jugando Play y ahora sí el partido fuera en serio. El beat de Onthervn, que tiene un porcentaje de campo más alto que Wilt Chamberlain, crea un ambiente con un toque nostálgico que invita a Danzziani a reflexionar. Además de ponderar la veracidad de las historias de Scarface que abundan en el rap, lanza de esas barras que son también lecciones de vida, las mejores: familia, códigos de barrio y un análisis agudo de la ropa de marca forman un cúmulo de ideas propias, siempre refrescante en un panorama plagado de clichés. “Mantenlo” nos presenta a un veterano que exige su respeto. Por como rapea, por como escribe, tiene todo el mío.

— Santiago Cembrano

Anyone/Cualkiera & Ignorancia Sofisticada — Go die

Los años no vienen solos: este es un dicho que refleja a la perfección la esencia de Go die. El título es un juramento del que se dispone a morir por el buen rap: “Go die no es otro disco de rap, señores / Muere por lo que tú vives y hazlo con honores ”, rapea Anyone en “Vuelve y juega”. El disco materializa todos sus años de rap, tanto en solitario como con No Rules Clan, un grupo fundamental en la época dorada del rap colombiano. Por eso la única colaboración es de Sison Beats, su compañero de grupo. Go die plantea reflexiones personales acerca de cómo un rapero llega a los treinta y se conserva fiel a los códigos de la calle de Envigado.

Anyone solo conoce las buenas barras, las que se formulan tomando Ron Viejo de Caldas con Ignorancia Sofisticada, el productor de este testimonio, desde los sonidos románticos del bolero de “Así soy” hasta el boom bap de Nueva York de “Vuelve y juega”. La producción es potente y cruda. Además de las rimas agresivas, los punchlines ingeniosos y las referencias para los nerds del rap, Anyone juega con los hooks. Escuchar Go die es como marcar a Shaquille O’Neal en el poste. Con un pase de Ignorancia Sofisticada, él solo tiene que recibir el balón y destruir a la defensa, y al tablero, con sus clavadas. Todo mientras reflexiona sobre el paso del tiempo en una vida dedicada al hip-hop.

— Nicolás Amarís

Bad Bunny — nadie sabe lo que va a pasar mañana

Al ser el artista más escrutado del mundo en el 2023, y ocupar el epicentro de la prensa rosa en medio de su relación con Kendall Jenner, Benito optó por la opción correcta en su sexto álbum individual: hacer las paces con el peso del poder y celebrar su idiosincrasia boricua bajo el marco de su primer amor, el trap. No es casualidad que nadie sabe lo que va a pasar mañana abra con estas líneas reveladoras: “Este disco no es pa’ ser tocado ni un billón de vistas / Es pa’ que mis fans reales estén contentos / Aunque yo por dentro no me sienta al cien por ciento”. Es una declaración incendiaria en el medio de la introducción más grandilocuente y transparente de su discografía. También es la antítesis de la intención comercial veraniega que reinó en Un verano sin ti.

Existen múltiples argumentos para cuestionar ciertas colaboraciones, decisiones en la producción e incluso la duración del disco. El álbum está lejos de la perfección, pero el atractivo de su honestidad radica en sus incoherencias. Se agradece el sentido de urgencia detrás del discurso, y la intención de experimentar con ritmos como el plugg en el gélido “VOGUE 787”, hasta su incursión en movidas más industriales, como en el lujurioso “BATICANO”. Si de algo sirve la última oferta del conejo es para reivindicar su latinidad y demostrar que las Kardashians, Hollywood y su estatus de celebrity no han podido corromperlo. Aún.

— Rodrigo Romero

Dr. Bene — El libro mudo

Los Mente Sabia Crú nunca escriben porque sí, en modo automático. Siempre hay una intención directa y un marco creativo en expansión. El Dr. Benévolo estuvo nueve años sin publicar un disco como solista, desde Salven a las palomas hasta El libro mudo. Eso significa años y años de crecimiento personal, como estudioso y como músico, y profundizar en conocimientos y herramientas para expresarlos.

“Mis letras ya no son pa’ niños, sí pa’ nietos”, retruca Bene en “Indivisible”, uno de los tracks donde más rastros deja de una percepción no-lineal del tiempo y una búsqueda más allá de los plazos. Valora enormemente la vida, no sin entender que estamos de paso. Se planta por la libertad desde las antípodas del individualismo. Piensa en grande, más allá de lo palpable, pero sin que sus pies se vayan de la tierra: Hay rutinas, amoríos, identidades, coyuntura.

Dr. Bene lleva una vida parado en Latinoamérica y está comprometido con este suelo. “Defensores del mar del sur” con Nosecuenta es la declaración más directa, pero su ponderación aparece incluso en las pistas, con el sonido caribe de “No es un remix” y la vibración andina de “Complejo de Frankenstein”, entre otros. De la misma manera, tiene su orgullo rapero, esquivo de los lugares comunes, pero respetuoso con la tradición. Así lo reflejan sus versos, portadores de storytellings vívidos, arquitectura de rimas e intelecto autodidacta.

—Agustín Wicki

La Brígida Orquesta — Música para la inmensa minoría

Música para la inmensa minoría refleja los discursos del presente sin caer en clichés ni redundancia. Los momentos destacados, abundantes a lo largo del disco, aparecen desde “The frask”, el primer tema, una inmersión en los dos ejes que estructuran la obra. Desde lo lírico, anuncia las incógnitas y preocupaciones que atraviesan a las juventudes chilenas (y latinoamericanas, en general), especialmente las concentradas en las urbes. El nivel de introspección es altísimo, pero se permite descender y ascender escalones a lo largo de las diez canciones que, como anuncia su título, aspiran a una expresión individual pero direccionada hacia las inmensas minorías. Esa lectura es, en sí misma, disruptiva.

El otro eje que articula el disco es la sonoridad, de instrumentales eclécticas e hipnotizantes, acompañadas por vientos agresivos que nos hacen sentir toda la fuerza emotiva de esta agrupación. Sus once integrantes no le temen a la vulnerabilidad: el manejo que le dan a la perspectiva romántica con la que sus versos tejen el mundo es de lujo. A la vez, demuestran palo a palo su maestría como alfareros de sonidos desafiantes, sobre todo si tenemos en cuenta lo alta que está la vara en cuanto a los vínculos entre el jazz y el hip hop, y lo alta que está la vara particular de los integrantes de esta orquesta. Portan la elegancia de las bandas más dedicadas a este conversación entre géneros, a la vez que agrandan el paisaje de lo posible al enarbolar una identidad propia, compleja y natural simultáneamente.

— Flor Viva

Caliope Family — 341

La agrupación rosarina asumió la capitanía del rap fusión en Argentina con este disco. 341 demuestra su calidad y recorrido sonoro al navegar todo tipo de aguas, que Brapis pinta con sus letras en forma de brocha. Así como la escena sudamericana juega con distintos géneros, Caliope profundiza en su jogo bonito musical y pisa con firmeza varios terrenos. Las vibras que riegan los treintaiún minutos del álbum se desplazan por los barrios del jazz, R&B, funk, soul y distintos rincones del hip-hop de este siglo.

341 propone un movimiento continuo y cautivador — poblado de invitados de lujo como Núcleo, Veeyam, Juli Giuliani y DJ Baladi — , en el que destaca su sensibilidad musical y literaria. El groove perspicaz que nos acercan, capaz de atraer a públicos distantes gracias a su frescura arrolladora, le aporta a la música hispana underground algo de lo que ésta está sedienta, precisamente. Anclada sólidamente en la ciudad de Rosario, Caliope nos pinta aquel horizonte con un estilo coherente, que ya caracteriza a las obras de la agrupación, especialmente con respecto al don de hablar desde y para su municipio sin dejar de tener la cabeza alta para ver la evolución del mundo del hip-hop a nivel nacional, regional e internacional.

— Flor Viva

Cerounno & VinylTracker — JCParadise

Resulta elemental resaltar este EP por ser la presentación de una dupla cuya aura prometedora se va transformando en hechos. Cerounno encontró en lo irónico un recurso infalible para retratar a su barrio y sus vivencias dentro de la escena. El título en sí mismo es una ironía que describe a José C. Paz, de donde ambos son oriundos, como un paraíso. Nada más alejado de la realidad. Esta particularidad lingüística está acompañada por una forma original y distintiva para clavar cada barra, que probablemente surge de entender las ventajas del drumless que le propone su compañero de andanzas: “Tu lealtad es trucha como mis Air Force blancas” (“197”).

Vinyltracker, el Chiqui, entiende los loops como la base fundamental de sus pistas. Cuanto más repetitivo y más simple, mejor. En estos beats — que encuentran en la ausencia de baterías su marca identitaria — , la densidad y la oscuridad suelen apropiarse de la atmósfera. Pero lejos de caer en esa costumbre, este productor le aporta una brisa de aire fresco al drumless hispano. Sus ritmos no evocan una calle solitaria y de luz tenue, sino más bien una tarde en la vereda con una pelopincho y una birra.

— Lautaro Yanes

Chuchú Bermudas & Willie DeVille— El pez que fuma

En 1977, Román Chalbaud estrenó ‘El pez que fuma’, un largometraje trágico que tiene lugar en una whiskería, pasaje donde se mezclan dilemas amorosos, líos de dinero y street hustle; la trama es tan completa que ha sido catalogada como la mejor película del cine venezolano. El pasado 6 de octubre, Willie DeVille, Chuchú Bermudas y Drama Theme presentaron un remake musical del film, tristemente, Román había fallecido apenas unos días antes.

Al igual que la película, el álbum tiene diferentes momentos, sonidos y sentimientos que nos muestran y recuerdan las facetas rítmicas y líricas de los tres. De las barras filosas del Dojo, podemos pasar a las rimas divertidas llenas de referencias de Lisérgicos, siguiendo con la nueva cara del junte de DeVille y Bermudas. Entre todo esto, hay cortes de diálogos de cine, discursos, partes de otras canciones y dedicatorias musicales a personajes del filme de Chalbaud, que robustecen la idea de que se trata de un disco que alza con orgullo la bandera de Venezuela.

Las colaboraciones son pesadas, resaltando los nombres de Lil Supa, N-Wise Alláh y 3M5. Sin embargo, rescatan del retiro al legendario Tek One, en uno de los mejores tracks del disco.

Cierran el álbum con un outro punzante que retoma la duda que tiene Danny Rivera y que cuenta como anécdota en un concierto de 1974, “¿Qué es mi patria? — Y Yuyo me dice, Daniel no preguntes por aquello que tú no has sabido buscar, sal a la calle, observa y entérate de lo que está pasando, antes de que la Patria pase por tu lado sin reconocerte”.

— Julián Roncancio

Craz Digga — Latino Bum Rush

Es muy difícil que un disco de hip-hop tenga un peso significativo si no tiene algo por decir. Craz Digga asumió el desafío que fue crear Latino bum rush como un director de teatro. La selección de su elenco de MCs, que incluyen a 3m5, Lil Supa, Dann Nigazz, Doktor Rheal y Robert Tiamo, habla de encontrar una unidad artística en la diversidad, ya que el eje del disco no se pierde nunca a pesar de las variaciones en tonos y estilos. La brújula que marca hacia dónde y quiénes se dirige el álbum cuenta con la relojería clásica de un verdadero DJ, un domador de sonidos y un artista de los platos.

Los aportes de cada invitado potencian la expresión colectiva, a la vez que nutren la narrativa. Latino bum rush articula un sonido atractivo con un registro artístico del presente (en este caso erguido por distintas voces, casi formulando cápsulas epistolares). Así contribuye al gran momento de expresión artística de las costas del sur del Caribe, que aportó más de un hito para este 2023.

— Flor Viva

Cruz Cafuné — Me muevo con Dios

El pasado 25 de mayo un volcán entró en erupción en el archipiélago canario. Un volcán que ya existía y que se había nutrido a lo largo de los años de la energía de Maracucho bueno muere chiquito, Moonlight922 y Visión túnel, hasta finalmente explotar. Como echar mentos a una coca cola, las placas tectónicas de Cruz Cafuné chocaron con ardor, violencia e ingenio en este álbum. El punto fuerte es su vehemencia lírica y sonora; ir a sus conciertos es asistir a simulador de calor y sudores pegajosos. Y esa vehemencia se combina con altas dosis de emocionalidad. El volcán no deja de arrojar kilos de magma, carisma y empatía.

A lo largo de su hora y cuarto de duración, los diferentes colores del álbum colisionan entre sí, desde el afrobeat de “Folelé” hasta el Jersey de “4Prez”, la balada intimista “Fabiola” o el trap violentísimo de “Ja Morant”, energía chisporroteante que se incrusta en la epidermis y el cerebelo. Cruz Cafuné es una erupción que se ha llevado por delante en las estadísticas a artistas con, a priori, más arsenal mediático que él. Ya ha conquistado su Teide particular. “Rapeo y te imaginas flashes al bajar de limusinas”, así luce Me muevo con Dios.

— Daniel Caballero

Dano — El hombre hace planes, Dios se ríe

El hambre de Dano por el estudio de la magia sin que se elimine ni una molécula de la misma cobra vida más que nunca en El hombre hace planes, Dios se ríe. Su culto irrefrenable a sus referentes dentro y fuera del hip-hop es lo aromático que articula la unión de todas las partes del disco. Y su ambición por darle cada vez más capas y más profundidad a su propia personalidad artística en combinación con todo aquello es cada vez más fuerte. La música de Dano suele educar a sus oyentes sin infantilizarlos. Eso le ha permitido múltiples veces ser un demarcador de paisajes posibles. Con un lenguaje en constante movimiento, fotograma tras fotograma, compás tras compás, todo lo relacionado a la esencia de este disco es devoto de gestos e hitos dorados de la cultura musical del español-argentino. Nos abre la puerta a un disco doble en el que los tracks pueden disfrutarse de forma escindida, pero que aún así construyen una plusvalía experimental al vivirse juntos.

Ambas partes del álbum conviven para graficar la flexibilidad de Dano, que tiene su contraparte en una firmeza típica de quien sabe lo que hace y quiere hacer, pero que se deja permear por las influencias que le interesan. Su cualidad como beatpicker sigue intacta, así como su habilidad para volcar sobre cada instrumental versos que recogen lo mejor de la poesía terrenal y de la hechicería abstracta de un buen maridaje de sílabas. Además de ser una gema más en la antología Ziontifik, el álbum en sí contiene un plantel de invitados que no funcionan a modo de complemento distraído, sino que nos señalan el mapa argumental y estilístico que habita El hombre hace planes. Además, este plantel retrata los fuertes e incomparables cables que, no por casualidad, unen a Dano con lo mejor de numerosos rincones de la música hispana contemporánea. Lil Supa, Juicy BAE, Dante Spinetta, Hoke, Mir Nicolás, Duki, Elio Toffana, entre otros, nos ofrecen un aporte a caras distintas del prisma de temáticas y vibras que nos suele ofrecer Dano. Él nunca para de mejorar, ya puede ser considerado un especialista 360 en hilvanar conceptos y en la albañilería de sus discos.

— Flor Viva

Dillom — AD HONOREM Vol 1.

El estribillo de “Minimi”, track que abre AD HONOREM Vol 1, sintetiza bien cómo rapea Dillom: “La doble G en el cinto no es de Good Game / Si hablamos de ver guita yo soy muy gay”. Desopilante, inteligente y, como siempre, un poco subido de tono, casi rayando en la parodia, pero sin perder el foco. Si bien Dillom nunca ha sido el más ortodoxo, ni siquiera dentro del mismo círculo del trap, lo que sí comparte con los códigos del rap más clásico es su actitud: va al frente, señala con el dedo y se presenta como el mejor. No se si pasa por “rap competi”, pero declarar “Que nadie te escuche no te vuelve de culto / Somos los mejores, punto / Con culo rotos no me junto, rapero enano, es un funko” es la manera de Dillom de frentear. Los beats que acompañan al jefe de la RIP GANG son lo que esperábamos: agresivos, juguetones y experimentales. Las bases le dan personalidad a cada tema, y muy rápidamente le dan una identidad a todo el disco, que se termina de construir con los rapeos de Dillom y su selección de melodías para los versos. Lo que más le gustaría a un fan del rap clásico de Dillom serían sus barras, honestas e inteligentes. Lo que más atrae del argentino a alguien en un palo más melómano es la búsqueda experimental y de construir universos que tiene. De todo, para todos.

— Martín Córdova

Douglass — Le Corbusier

De todas las maravillas arquitectónicas diseñadas por el suizo que le da el nombre al segundo disco de Douglass, la obra Cabanon de Vacances fue la única que hizo para ser habitada por él. Pasó todos los agostos durante catorce años en la casita, que es considerada el patrimonio de la UNESCO más pequeño que hay. Podemos leer entonces al tema que lleva este nombre, y cierra el disco, como el capricho de Douglass; un gustito del chileno para escupir algunas barras personales. Este paralelismo está presente todo el tiempo, y le da forma al disco, lo conceptualiza al nombrar los temas como grandes obras o referencias sobre la vida de Le Corbussier. Con versos como planos arquitectónicos y beats de Wuilldafriqq que sientan bases sólidas, Douglass hace alarde de su pluma, sus skills de rapeo y su lado más artístico para crear una obra completa, admirable. “L’Espirit Nouveau” es una declaración de principios sobre la nueva camada de rap chileno por venir, el nombre del tema hace referencia a una revista vanguardista de los años veinte, que tenía como slogan “Hay un espíritu nuevo; es un espíritu de construcción y de síntesis guiado por una concepción clara”. O, como dice Douglass: “Pongo mi música y como república / Checa toda la escena / Los planos de esta nueva era / Sentando bases para inaugurar la nueva pieza”. Por supuesto, el feat con el argentino Troubless lleva el nombre de la casa que hizo Le Corbussier en La Plata, Buenos Aires. Así, durante todo el disco, Douglass profundiza su visión del rap, de la mano de una lista de temas donde sobran barras y beats letales. Aprecia el concepto.

— Martín Córdova

Ébano & A. Dense — COSAS QUE BRILLAN

Explicaba el difunto periodista Jesús Quintero que hay un viejo axioma en la comunicación que dice que si un grifo está continuamente corriendo, solo reparamos en él cuando deja de echar agua. Este es el núcleo de la música y del personaje de Ébano: dosificar sus lanzamientos, medir los tiempos y saber cuándo hay que estar callado, que es más valioso que saber cuándo hablar. En este EP, producido exultantemente por A.Dense, le escuchamos incursionar en ritmos más animados — ”Face ID” y “Todo bien” — pero igualmente dramáticos. Ébano toma el drama que supone vivir, lo estira y todas las palabras que salen de su boca son automáticamente recubiertas por él. Su verso en “El elegido” muestra la maestría con la que se acerca a un sentimiento tan desagradable como la agonía. Esa voz al borde de quebrarse, que canta pero a la vez parece pedir auxilio es la prueba de que no importa tanto lo que se diga, sino cómo.

“Ten Cuidado”, un rapeo mano a mano con Hoke, probablemente es uno de los mayores exponentes de ese ambiente penumbral-carismático tan propio del artista; una atmósfera desafiante y una tensión amenazante recorren toda la canción. En definitiva, esta es música de capucha; potenciada gracias al respeto que le tiene al señor tiempo y al señor silencio: “Si nos disparan yo te cuido de las balas / He perdido altura por los tiros en las alas”.

— Daniel Caballlero

Ergo Pro y cómo ganar un beef sin sudar

En el rap hay solo una regla para ganar un beef. En realidad hay dos, pero una depende de la otra. La primera es no enojarse: el que se pica pierde. La segunda, claro, es escribir barras mejores que las del otro. La primera instancia, mantener la cabeza fría es clave. La claridad para saber qué decir (¡y qué no!), qué responder, de qué burlarse, no se encuentra en la rabia. Por eso, desde el vamos, Ghostpell no tenía chances de medirse con Ergo Pro. Cuando lanzó “El efecto Streissand” y disparó contra el rapero de ascendencia nigeriana, se mostró enojado, frustrado, y la longitud excesiva del tema (¡quince minutos!) se leyó como resentimiento. ¿Quién lanza un diss track de quince minutos después de tres años sin sacar un disco? A su favor Ergo tenía ser el atacado, el que contesta. Pero además, que es un escritor de la san puta y que entiende el juego. Los beefs instalan narrativas, y Ergo Pro supo qué puntos de Ghostpell atacar. Primero Ergo cuestiona su talento (“Llevas como tres años pensándote un genio, nene / Pero si contar esdrújulas, de free lo hace el Bnet”) y sugiere que su mayor dote musical no es para tanto. Por otro lado, logra transmitir con facilidad quién es el OG: “Hablas de Venezuela, farmeando como un pocho / Pero yo ya estaba con el Supa en 2018”.

“Jodido friki, defendiendo la nación / Yo abriendo el show a M.O.P, tú en rehabilitación”. El golpe más letal quizás sea cuando mete el dedo en la llaga con las denuncias que rodean a Ghostpell: “Te ocultas tras la música diciendo que hable ella / Porque como hablen ellas no vas a pagar tus pellas”.

Game. Set. Match.

— Martín Córdova

Franco Carter & Esse Delgado — Sunday truce

De la iluminación de una soleada mañana dominguera emerge el primer álbum entre Franco Carter y Esse Delgado. El DJ y principal productor de Las Ninyas del Corro ofrece su faceta más soulful a un Carter reflexivo y reposado, la mejor de sus versiones para adaptarse a estos ritmos. La apuesta y enfoque de ambos es clara y concordante: un proyecto cálido y repleto de condición humana, que huye de los LED y la fluorescencia de la noche. Su buena química resulta en un disco que destaca por lo que muestra, pero también por lo que subyace en su discurso y contenido.

Si bien Sunday truce cuenta con una banda sonora excelente, acompañada por rimas elegantes de Jeke Mamoneos, SD Kong, Las Ninyas del Corro, Rapp Gotti y el propio Carter, el proyecto alcanza un punto de culto con el mensaje que su vocalista predica. Sin caer en paternalismos, pretensiones o sermones, Carter explora, de manera más bien implícita y a través de la moral más universalista, la consciencia de clase y la propia autoconsciencia desde escenarios conflictivos y adversos. Sunday truce es un acuerdo de paz en periodos de entreguerras de mayor o menor escala o el espíritu de quien, pese identificar y conocer al culpable, primero busca soluciones. Sunday truce es el disco de quien prefiere invertir capital para duplicarlo en vinilo a financiar una campaña de marketing o un videoclip.

— Gonzalo Trismegisto @gadc333

Frane — Bosque negro

Cuando uno piensa en rap latino no se le cruza la idea de que de ahí pueda salir algo más frío que los inviernos neoyorquinos, pero al sur del sur hay una ventisca más helada que las que se imaginan en la gran manzana. Incluso aunque Frane hace años alterna su residencia entre su Ushuaia natal y la capital argentina, su valor agregado es que es capaz de llevarte al lugar de donde viene a través de sus producciones. Pero es que ni siquiera hace falta que la persona que esté escuchándolo haya pisado la nieve para adentrarse en su bosque negro. Basta con que escuche estos versos de “Juan Nieve: “Dicen que me vieron cruzando los cerros / Terrenos donde hombres caen muertos / Entre los bosques donde nadie ha vuelto / Si el invierno viene se siente mi verso”.

Los beats del integrante de la Conección Real llevan a la Patagonia en su ADN. Es un vínculo estrecho e inquebrantable. Lejos de querer distanciarse de la impronta que lo caracteriza, Frane la abraza a través de una ingeniería de sonido excepcional. Desde la portada hasta cada pista, entre las que hay drumless pero también reggaetón, este disco está íntegramente hecho por él. A esa ambientación atmosférica se le suman las barras de un liricista que reconoce la trayectoria que carga en su espalda y el lugar que ocupa, sin dejar de lado su sello underground, en una cultura hip-hop que cada vez abarca más lugares del imaginario popular argentino.

— Lautaro Yanes

Guerrita & Ciclo — Metrópoli

Con la paciencia y la serenidad de quien no necesita demostrar ni pedir nada a la escena musical, y tras un trayecto anaeróbico y una pandemia de por medio, Guerrita volvió a entregarnos un álbum tras más de cinco años desde su Loto y papiro. Como en su anterior disco, en Metrópoli vuelve a contar con Ciclo para la íntegra producción del proyecto. Uno de los primeros aciertos de este segundo largo entre los dos andaluces se da al invitar a músicos como Amber Window, Hugo Astudillo y GXNZX, que aportan arreglos que acaban de equilibrar y texturizar la rica y diversa naturaleza de Ciclo en un disco que consigue transmitir incluso más alma que su anterior proyecto conjunto.

Cuidadosamente mimado en todos sus aspectos, debemos hasta mencionar el magnífico imaginario simétrico de Sakerinox, el cual abre de manera visual, cual portada del New Yorker, la distopia fritzlanguiana en la que Guerrita se sumerge y desde la cual explota su ácida sátira. Desde una perspectiva mundana y costumbrista, el cordobés incide tanto en las conductas colectivas como las personales y se retuerce en paradojas de la sociedad posmodernista en las cuales, pese a ser instigados hacia el individualismo, a gran escala, podemos ser representados cuales pequeños autómatas de apariencias y propósitos similares. Metrópoli es ese disco que invita a la reflexión sociológica sin renunciar a su finalidad estética, menos aún a su esencia hip-hop.

— Gonzalo Trismegisto @gadc333

Holy K — Workaholyk

De Miramar, una ciudad de treintamil habitantes amarrada a la Costa Atlántica, es Holy K, que llegó a 2023 como la mayor promesa del hip-hop argentino, avalada por los mejores y por cualquiera con oreja que haya escuchado al menos cuatro barras de su arquitectura verbal. En el nicho, la presión para su disco debut era gigante. No había margen para la sorpresa. Sin embargo la mayor presión no venía de la expectativa de terceros, sino de ella misma. Holy K es su mayor rival y su actitud es la de que no hay nada que demostrarle al resto, flamboyante.

Son 43.252.003.274.489.856.000 las combinaciones posibles del cubo rubik y unas cuantas más son las rimas disponibles si manejás el español y el inglés al nivel de Holy, que en soledad probó y probó por impacto, fonética, cadencia. El silabario ya le queda como la cuerda de un yo-yo con la que puede hacer lo que quiera. Párrafos y párrafos en cuadernos llenos de técnicas y referencias de música, historia y River Plate, escritos durante años bajo la tiranía del perfeccionismo, terminan en Workaholyk, que supera holgado el hype, sin fuegos artificiales.

Sea en servicio de la competición, el desahogo o el (des)amor, la constante que queda no es necesariamente la complejidad técnica, ni siquiera el estilo totalmente propio: es ella con una pista y la hoja en blanco que sirve de espejo. Incluso cuando ella ya no esté, va a quedar su sensibilidad palpable: “El corazón que me delata no es el de Poe, es el de Soda”.

— Agustín Wicki

Holy Youth — Visionarios

Si hay un colectivo que ha dado que hablar este año ha sido la Holy Youth, o lo que es lo mismo: J Battle, Neo KB, Red Pray y Hell6boy. Talento Made In Alcalá de Henares que con la publicación de su primer disco, Visionarios, ha colocado rápidamente su nombre en el mapa. Cada uno de sus integrantes tiene un flow muy diferente y todos mantienen la misma consistencia lírica, sin fallar una, algo difícil de ver en grupos, siempre hay unos que despuntan sobre el resto. Aquí reina la armonía porque todos son buenos, de ahí la versatilidad y solidez de su primer trabajo conjunto.

Los miembros de la Holy tienen la visión, y ésta va más allá de la música. Conscientes de la importancia de convertirse en grandes artistas en el más amplio sentido de la palabra, la Holy cuida cada detalle de todo aquello que rodea a sus canciones, de ahí la importancia que le dan a temas como los visuales o a la propia moda, tan unida siempre a la música que acaba por convertirse en un elemento capaz de amplificarla, como es este caso.

Temas como “Fo’ Fo’”, “Margiela” o “Ronaldo el Gordo” son claros ejemplos del poder que tienen cada vez que se unen. Sin embargo, este año no solo han logrado elevar su potencial en conjunto, todo lo que han ido haciendo sus miembros en solitario — han estado bien activos — es digno de mención.

Orgullo, alegría y fe, mucha fe en la Holy Youth. Estamos en buenas manos.

— Julia Álvarez

Jam Block Jr & Norm Regular — One hand washes the other & las dos lavan la cara

Escuchar One hand washes the other & las dos lavan la cara es viajar a la Costa Este desde la comodidad de tu casa. El trayecto está guiado por Jamblock Jr. desde Bogotá, junto al productor W910 desde Cali y, directamente desde Nueva York, Norm Regular.

“Jungles” inicia la escena con puños y patadas. Es violenta, voraz. “Trágate mis balas con esta magia negra y cruzada escrita que te agrada, yo / Un hijo más del vicio al bloque / Miles de letras para alimentar torpes de sur a norte”. Ninguno está jugando, cada uno está dispuesto a sacar sus mejores rimas durante los veintidós minutos que dura el álbum. Cada barra es mejor que la anterior.

En “Rosario”, tras cinco canciones de pura grasa, llega otro invitado desde la ciudad de Cali, Izla, que alcanza a la triada como un complemento que encaja como un puzle perfecto. “Lenguaje secreto / Amuletos y rosarios / Téngale a Buga, pana, rezan lo sicarios / Vueltas inconclusas, las calles son mis musas / Fronteras invisibles, solo muere quien las cruza”.

Para finalizar el corto pero provechoso recorrido, el álbum cierra con una canción homónima, que lejos de sentirse como un placer saciado, deja al oyente con ganas de más. No hubo respiros durante las ocho canciones. Hacía falta tomar aire, pero ojalá no haya mucha espera para volver a escuchar a esta triada una vez más.

— Sofía Ariza Varela

Joc Beats

“Este disco es para noche de lluvia y capucha”, reza H De Perra en Clusters, el álbum que publicó junto a Joc Beats en abril. La ambientación alcanzada por el productor en este proyecto es una bandera que carga desde hace tiempo y que ha pulido con los años. Desde las sombras, el beatmaker de La Yaya alcanzó un sonido denso y oscuro propio de una película de suspenso a través de una selección de samples exquisita.

En octubre publicó Los cerdos no pueden mirar al cielo, de la mano del español Pablic S, un proyecto que sirvió para dejar en claro la versatilidad del productor. Con el rapero de Burgos se corrió del grimey sound alcanzado en Clusters para buscar un sonido más preciosista, que sí bien no deja de ser drumless, deja relucir aún más su influencia en la salsa y otros ritmos alegres.

Como si esto fuera poco, su amigo Nichess One lo invitó a participar de METAL, el trabajo colaborativo que estrenó junto a Lil Supa aka Marc Ginale y 3M5. Su participación se dio en el tema “Níquel” y dejó un valor simbólico importante por ser una conexión internacional de un calibre que no ocurre con frecuencia. AGITANADA, de L’Peqeña y Pasa en las películas, de Ocho 888, entre otros, son algunos proyectos donde Joc también dejó su huella en 2023.

Es difícil saber cómo va a ser el rap argentino en lo que queda de la década, pero seguro va a sonar mucho a Joc Beats.

— Lautro Yanes

Johny Doc & Allan Parrish — Expectedly unexpected

Hay artistas que necesitan de focos externos para realzarse y, en cambio, hay otros que inconscientemente los construyen por cuenta propia. Johnny Doc es su propio foco. Eso sí, un foco con una luz tenue, casi de penumbra. Es ese vapor que sale por las noches de las alcantarillas de Nueva York. En este 2023 el rapero afro-valenciano ha ensanchado notablemente su discografía. Nada más arrancar el año lanzó Lost in translation 2, la secuela de la primera mixtape, donde rapea sobre ritmos de Nas, Pusha T o Roc Marciano. Después fue Blue magic, junto a Rapp Gotti y el productor LeBleu, un EP lisérgico, con trazas de psy rock y que gira conceptualmente en torno a la heroína pura que da nombre al trabajo. Meses después publicaría Eight ballers, escoltado en la producción por DaBasement, un proyecto apoyado mayormente en samples clásicos y solemnes. Y finalmente, entre single y single — “Mia Khalifa”, “Discos de Motown”, “El Show de Arsenio 1 y 2” y “Brindis”, junto a N.Bajozero — nos deja este Expectedly unexpected, junto a su paisano Allan Parrish. Bendecido al inicio por Cruz Cafuné, este es un trabajo experimentalmente sucio y oscuro, con reminiscencias de S.O.D.A., el álbum que Parrish hizo junto a SD Kong. El fuerte de Johnny Doc radica en trinchar frases en español e inglés con una facilidad pasmosa, además de sonar creíble. Con esa voz grave y un delivery delicioso, su corpus temático repta entre el gangsta rap, los bajos fondos y las penurias, pero persiguiendo también la buena comida, las joyas y, en definitiva, la alta vida.

— Daniel Caballero

Jonas Sanche — LEGEND

“Cada vez siendo más sabio / Hablo pausado (Elías White Lion)”: barras que vienen de un jóven veterano abierto a referenciar sin prejuicios en el marco del mismo disco a Ivy Queen, Wyclef, Rakim y Eddie Dee, pilares de la cultura que muchos han querido antagonizar bajo pretextos ortodoxos e intransigentes. En esas líneas brilla el espíritu creativo de Jonas Sanche, un melómano inquieto que no teme hacer malabares líricos en “ULTRA FAT” por complacencia propia, mientras que paralelamente confiesa su amor por la música de Eladio Carrión en entrevistas y referencia al jersey club en “DECISIONES”. Ahí está la magia de LEGEND, en perseguir exitosamente un sonido universal y mercadeable sin perder su identidad en el proceso. El antofagastino ya hizo rap para raperos, ahora fabrica rap para el mundo. Si el mainstream eventualmente no le da el puesto que merece, será por circunstancias injustas de la industria. Esperemos que no sea así.

— Rodrigo Romero

Komp: MVP del 2023

La campaña de MVP del Komp este 2023 es la más cargada que se haya visto para un rapero en Argentina. De enero hasta hoy, Komp publicó dos álbumes y una mixtape que sumados a las tandas de temas sueltos en YouTube y Soundcloud suman cincuenta y dos tracks en total. Uno para cada semana del año, sin contar apariciones en cyphers y feats. Aunque ya más desdibujada la línea estadística, si Komp no es el MC argentino que más géneros ha probado está cerquísima. Al diggear en su catálogo se encuentra de plugg a corridos tumbados, de west coast a reggaetón. ¿Por qué tanto y tan variado? La respuesta de Komp es tan sencilla como genuina: “Está piola hacer música”.

Detrás de las cifras por supuesto que están la calidad y la novedad. Ese tema suelto en YouTube es ‘Todos Sangran’, de lo más evolucionado en la dimensión del rage. Entre las cascadas de sintetizadores Komp firma una condena, “Todo el mundo sangra, ¿qué te hace creer que vos sos Dios?”. Todavía más ilustrativo de su productividad es su alterego Foolian, rostro que ocupa para despachar versos sobre drumless y boom bap. “La hoja al rojo vivo como Canadá” es incontenible.

Oriundo de Tucumán, parte toda pista que le pongan delante. Tiene la palabrería, el tumbado y una línea que siempre sigue. Mientras el resto todavía está en Playboi Carti este año junto a Bles hicieron “Feamente” y “BRSS”, dos discos protagonizados por el Detroit Trap y el darkplugg respectivamente, que se convirtieron en las tapes de sonido más actualizado en el trap de Argentina, con todo lo que eso significa. Están mandando a que actualicen el parche en el mainstream y el underground.

— Agustín Wicki

Lia Kali — Contra todo pronóstico

Su peculiar voz, su gran sensibilidad y esa manera tan directa que tiene de transmitir sentimientos han hecho de Lia Kali una de las artistas más interesantes de este 2023, un año que ha visto nacer su primer disco de estudio, Contra todo pronóstico. Es un debut impecable que supone una encrucijada de géneros y confirma su enorme versatilidad. Amante de hacernos vivir emociones fuertes, Lia Kali concibe el rap desde esa libertad que a lo largo de la historia ha permitido que el género siga creciendo. Ajena a prejuicios, la artista llega cargada de lírica, carácter y una depurada técnica que ha ido adquiriendo tras años subida a los escenarios, donde actualmente da la mejor versión de sí misma. Impoluta siempre que rapea, Lia Kali nos ha dejado momentos brillantes este año como “UCA”, tema que abre el disco y que se ha convertido en uno de los mejores storytelling que nos ha brindado el rap en los últimos tiempos. Rapea igual de bien desde la crudeza que desde la debilidad, algo que no está al alcance de cualquiera. Consciente de cómo debe llevar su carrera y ciñéndose a pocas colaboraciones, como las que ha firmado este año con FERNANDOCOSTA, para no saturar demasiado su marca y seguir dibujando un camino con nombre propio, Lia Kali ha demostrado este 2023 que no es solo un estupendo presente sino una apuesta segura de futuro. Con Contra todo pronóstico ha nacido una artista en mayúsculas. Lia Kali está destinada a ser grande.

— Julia Álvarez

Lil Supa & 3M5 & Nichess One — METAL

Venezuela como faro del rap en idioma español no descansa. Es faro, también, en cierta característica perenne del hip-hop que implica trazar lazos y puentes duraderos y que den frutos como el que dio esta unión entre 3m5, Lil Supa y Nichess One. METAL es uno de los proyectos más prolijos del año. Su eje temático es visible en los títulos de las canciones. Su eje estético se aprecia no solamente en el ángulo de las instrumentales y las perspectivas de las letras, sino también en las elecciones artísticas que acompañaron y tiñeron elementos como la presentación en Ciudad de Buenos Aires, la difusión comunicacional y el arte de la tapa. No hay que perder de vista que el domo de consistencia autoral y estética incluye la elección de instrumentales (con productores como Jocbeats, Oldtape, Doktor Rheal y Drama Theme, entre tantos) y de los sonidos que componen dichas instrumentales.

La entereza ante una adversidad impecablemente descripta, lo competitivo en el ámbito lirical y los puntos de vista sobre sus roles en la música son parte importante de los temas que forman parte de METAL. Eso no opaca la profunda cotidianeidad de sus discursos, algo que les permite hablar de temas como la violencia, la sociedad y sus propias experiencias de una forma tan concisa como filosa. Venezuela y Argentina como escenarios geográficos esenciales para la identidad de este álbum son puntos unidos por fuera del disco y de la música vía miles de experiencias que hoy en día pueblan de manera contundente el hip hop en ambas naciones. Una vez más, como en lo originario que compone a esta cultura, los movimientos migratorios de todo tipo son una siembra de inspiración para los artistas (incluso con sus implicancias más astillosas), y METAL es una excelente expresión de esto, al cosechar pura imaginería y relato sudamericano.

El orgullo del underground de siempre y el valiente ímpetu de convertir un horizonte de realidades oscuras y complicadas en piezas artísticas valiosas son cosas que vemos frecuentemente, pero hay que resaltar cuando esto se logra sin abandonar los ángulos más crudos e inapetecibles para los estómagos sensibles, como es el caso en lo escrito por las tres plumas involucradas. El resultado es uno de los discos de más calibre del 2023, que rehúsa de lo blando, comprador y demasiado suave cuando de relatar realidades se trata, y que apuesta a metáforas ardientes y golpes sin amortiguación que penetran los oídos.

— Flor Viva

Luis7Lunes & Sison Beats — El milagro

Isaías 56:12 declara lo siguiente: “Venid, dicen, tomaré vino, embriaguémonos de sidra; y será el día de mañana como este, o mucho más excelente”. Sison y Luis7Lunes se unen para beber junto con los cinco apóstoles del rap: Ignorancia Sofisticada, Franco Carter, Vic Deal, Kid Sánchez y Eztone. Esta es una junta profética para rimar en lenguas de fuego y registrar sobre papiro. El Espíritu Santo nos bendijo sobre santas bases drumless para profesar El milagro (2023) por el mundo entero.

Las colaboraciones de Sison y Luis se remontan a 2015, por allá en Envigado, cuando el primero produjo varias canciones de Ruidos en Hamelin, el debut de Luis, en el que también participó Vic Deal. A partir de ahí, han sonado juntos en “Lancha Rápida (2020) y Audio descriptivo (2020). Los demás apóstoles llegan como pescadores de hombres. Ignorancia ya había colaborado con Sison en Pantone (2019), Welcome to the world of Nemesis (2019) y El puente (2022). Kid Sánchez apareció en Rap Cum Laude (2022). Eztone y Franco Carter son los nuevos en este barco, rimando en las calles, haciendo música para prostitutas, ladrones y asesinos. Justo como lo hizo Jesús en su tiempo.

El milagro es una muestra de fe. Las rimas están repletas de peso y complejidad. Los registros y bases de los apóstoles constituyen una biblia. El Señor iluminó estos versos divinos. La sonoridad es celestialmente callejera, como si el templo estuviera cubierto de graffiti. Al final, todo es devoción al rap y Dios, porque del rap somos, y al rap volveremos.

— Nicolás Amarís

N. Hardem

Bogotá es una ciudad gris donde la lluvia inunda las casas cada vez que llega un diluvio sin avisar. En uno de esos hogares reside uno de los grandes, a quien esperábamos de vuelta con un álbum de larga duración. La espera no ha llegado a su fin, pero N. Hardem ya lanzó tres sencillos que dejan empapados hasta los pies a todos los que se atreven a recibir sus rimas, que caen del cielo sin cesar.

“Casitico como Zebra, Ata y Kani/ Ícono de mi época, Manicongo Carabalí”, empieza “M.I.R.L.I.B.”, y se compara sin pudor con las leyendas de La Etnnia. No hay envidia en este primer sencillo. “Crisis de Papel” no se queda atrás. La participación de SHANTÉH sobre el beat de Hi-Kymon hacen de esta colaboración un deleite, no hay forma de escaparse. La guitarra junto a la voz de la femenina genera un aura envolvente que prepara al oyente para las palabras de N.Hardem. “Uno no sabe a quién va a atemorizar / Par de negros que sepan monetizar / Llega pa’ encima, está por iniciar / Que no te hagan botones pa un oficial”.

¿Qué decir sobre “LUFTHANSA”? En la producción está Don Cee, una leyenda viviente. Ambos se complementan con su color, como el verde con el rojo. Esta canción cierra el semestre por lo alto, prometiéndole a la audiencia que el próximo año podrán ser invitados a su nueva casa, pero únicamente si son dignos de confianza.

— Sofía Ariza Varela

Nico Miseria — El periplo del héroe

Ser demasiado honesto con uno mismo puede ser un arma de doble filo. Es cierto que existe un mérito importante en el autoconocimiento, pero también hay un riesgo latente de caer en el autoflagelo. Nico no le tiene miedo a esto. Todo lo contrario. El periplo del héroe es el testimonio de un rapero que primero se mira en el espejo y ve reflejados en sí mismo las problemáticas y los dolores que atraviesan a su círculo íntimo, aunque también las prácticas y costumbres que caracterizan al rap español. Analizar de adentro hacia afuera, nunca en reversa.

Con la estructura más clásica de la ficción, el rapero y productor narra una historia con principio y final donde expone todas sus reflexiones posteriores al Tercer verano del amor. Ese recorrido tiene como hilo conductor una innovación de sonido impactante con samples que parecen arbitrarios, como la apertura de EA Sports, pero que son partes de un complejo rompecabezas. Drumless, rage, trap, góspel y más géneros conviven y se entrelazan en una jungla de sabores que trae como resultado una experiencia que se escabulle de las etiquetas.

— Lautaro Yanes

Niño Maldito — Sa Ta Na Ma

El Niño Maldito es incapaz de hacer un disco normal. Gracias por eso. Las imágenes que se revelan en “Sa Ta Na Ma” son tan espeluznantes como hipnóticas: “Soy el pasado en tu lomo y te pesa / Mientras meto la nariz en la bolsa”. Es rap crudo y violento, más que el de los gangsters, con una podredumbre a la que solo han llegado los proselitistas del horrorcore.

Para el canario maldito autoflagelarse es un pensamiento intrusivo y también uno meditado. “Soy una mierda pinchada en un palo” es lo más lindo que tiene para decir sobre sí mismo. Solo al fondo del iceberg de rap y salud mental se genera una adrenalina como la que inyecta el Niño. No hay mensaje.

En “Ruina”, encima de un trap chirriante con samples de flamenco, narra las mil y una noches que nunca terminan. Un plugg líquido sirve para “Tiro 3 dados me salen 3 seis”, lo más parecido a una canción en todo el disco. “Muero joven” tiene drum n’ bass; “INT LAS 3”, west coast; y todo el álbum está infestado de una forma hardcore de rapear. Es una versatilidad de sonido producida aún en el encierro de Niño Maldito, que escribió, compuso, produjo y grabó todo.

Sa Ta Na Ma es un homúnculo vástago de una cabeza donde el sonido más armónico puede ser un tínnitus. Asonante, con sus canciones siamesas y transfusión de géneros, predica una palabra peligrosa.

— Agustín Wicki

El Nido — El vuelo

Pregúntale a cualquier jugador: las victorias de la temporada son, en buena parte, el resultado de solidificar los fundamentos durante el verano. Luego de tres años desde Sagrado, su debut como grupo, El Nido regresa con El vuelo, que, precisamente, desbloquea un nuevo nivel para el trío compuesto por Sike Damodar, Alman Lenid y Repz Bar$. Los de Floridablanca, Santander, hacen de su territorio un campo de fútbol en el que esquivan patadas y se lucen con gambetas finas, en el que repasan su origen y su destino (“Milagro”), buscan separar el oro de la pirita (“The truth”) y se mantienen hambrientos: que no paren los triunfos (“Gris”). Las habilidades pulidas de los MC — en cuanto a escritura, flow, registro: todo — le hacen honor a los ritmos de Barrasdereptil, el álter ego de Repz, que confirma su estatus como uno de los duros en la producción nacional, sea con baterías contundentes o con ambientes en los que un loop es suficiente. Si en el rap hubiera premio al jugador que más mejoró, El Nido es Lauri Markkanen. Y al igual que la del finlandés, su proyección no acaba acá, sino que apenas empieza.

— Santiago Cembrano

Oblivion’s Mighty Trash — No me acuerdo

Si hubo algún rapero que anotó goles este año fue Oblivion’s Migthy Trash. El antioqueño no solo brilló por sus sencillos, sino que, con su EP MONSIEUR y su álbum No me acuerdo, demostró que, si bien alcanzó reconocimiento en el 2021 por Medallo Bullies, no es un jugador que vive de una sola victoria.

Cabecear con temas como “BUMBÁ”, “COMBO (MIH)”, “NO SIGNAL” y “Mierda En Mis Bapestas” no es una opción, es una obligación. Las barras muestran un total dominio de la pelota: va solo, un parpadeo del equipo contrario basta para que tome la delantera. “Saben qué hacer / Yo tengo la batuta / Me cago en su estirpe y pongo a bailar hasta al hijueputa / Mostrame esas dos caras que a las dos les tiro escupas”.

En la titular lo respaldan desde la producción Pocket Tincho, Saygi y AGAPO, mientras que en el mediocampo lo siguen en las rimas Isaac S.A, Niche Ls y Adam Walsh, que juntos completan la nómina perfecta para escalar en la tabla de posiciones del sonido de Medellín. Allí parece que empiezan a dominar los nuevos talentos de la ciudad.

Apenas empezó el campeonato, pero Oblivion’s ya amenaza con convertirse en uno de los favoritos del torneo. Sus manos se alistan para levantar un par de copas, pero antes pide una pausa para fumar.

— Sofía Ariza Varela

Pablo Chill-E — El Duende Verde

En medio del boom actual del reggaetón chileno, Pablo Chill-E decidió hacer lo que se le da naturalmente: hacer palos de trap, ni más ni menos. En “mínimo esfuerzo” rapea: “Casi ni me esfuerzo y le doy sendo corte”, un testimonio de que la ambición no es el atributo protagónico de este disco, pero si la facilidad de su autor para flotar en beats durante sus veintiún temas. Lejos quedan las comparaciones con figuras anglo como Lil Baby o Gunna, que han alcanzado un punto de saturación preocupante. Por más que Pablo se nutra de la misma fórmula de proyectos anteriores como S.U.N.O, aún le quedan ideas melódicas atractivas y palabreos interesantes. El duende verde sirve como prueba de que el ícono del trap chileno no planea dejar el podio pronto. Esperemos que su inquietud creativa no merme y que el tiempo se lo permita.

— Rodrigo Romero

Rap Bang Club — “Satisfayer” (prod. Phynx)

Quizás la canción que más me sorprendió en el 2023 fue “Satisfayer”, de Rap Bang Club. El beat me transportó a la época en que empecé a escuchar rap, cuando Snoop Dogg sacaba temas como “Beautiful” o “Drop it like it’s hot”, o Timbaland se juntaba con Nelly Furtado para hacer canciones increíbles. ¿Será que por acercarme a los treinta busco en la música que me gusta un portal que devuelva el tiempo? No lo sé. Sé que el mexicano Phynx les dio a Karin B y Pezcatore la base perfecta para que sus estilos mantequillosos brillen en el mejor corte de su debut, Perro romántico. El coro de Pezca me eleva y la voz grave de Karin contrasta bien con la ligereza del beat. Tanto me gusta “Satisfayer” que olvidé que al principio no le quería dar play porque no me gustaba el nombre. Pero vencí mis reparos y acá estoy, bailando mientras escribo esto y pensando en que necesitamos más rap que actualice esa gracia dosmilera.

Santiago Cembrano

Riber & Rober — Bottega Altriana

Nos encontramos en un periodo histórico en el que el arte y la música cada vez ofrecen más posibilidades, en el que vemos cómo sus géneros se fusionan y se ramifican en cuestión de meses. Si bien la pluralidad de estilos y la enorme expansión de cualquier género musical son indiscutibles, ese mismo océano de propuestas trae consigo mareas de arquetipos que acaban impregnando denominadores comunes a muchos artistas. Si había que incluir Bottega Altriana entre los mejores proyectos del año es, en parte, por saber navegar entre las diferentes mareas sin arriar su bandera. Fruto de la hermandad y la genuinidad, Riber y Rober podrían considerarse artistas relevación en este 2023, aunque eso también podría ser desmerecer proyectos anteriores como 41XXXB¥$ Galantuomo Vero.

Una simple mirada a la portada del álbum basta para entender que lo que la doble erre presenta es algo más que un disco, y es que, bajo colores burdeos, símbolos enológicos y una marca ficticia, este 2023 ha sido el año en que Riber y Rober han patentado su nombre y su fórmula. Bottega Altriana es un producto fermentado en Sevilla con materia prima de importación mediterránea. Si el producto de Bottega Altriana ha conseguido diferenciarse de los demás ha sido por su jerga, su contenido italo-hispánico y su sentido del humor, así como su variada oferta de sabores. Desde la elegancia y madurez de un vino tinto añejo hasta la frescura de un vino blanco, Riber y Rober han logrado instaurar la más consistente línea vinícola del momento. No apto para papawakas.

— Gonzalo Trismegisto @gadc333

Ruzto — “Redundancia”

Tras un álbum experimental en el 2022, Ruzto vuelve al vientre. Aunque no deja de probar con ritmos latinos como la salsa, hay barras de sobra en sus rimas. Así lo demuestra con brillantez en el tema que acompaña Granuja desde la producción: “Redundancia”, su primer sencillo de este año.

“Llegando a Queens / A mí se me acabó la gringuería / Cruzando el JFK / Sudando frío y sin cocaína”, relata deslizándose sobre el beat. Así le da continuidad a la historia que había quedado inconclusa en Efecto Espectador, en el que describe su vida como migrante en Estados Unidos. Ha vuelto, y no solo físicamente. “Me devuelvo porque quiero romperla desde Colombia / Si vas pa’ afuera, por si las moscas / No hables mierda del país, que no eres rico haciendo doordash”.

Pero lo que hace que esta canción sea un plato fuerte con sopa y seco es el trabajo que hace Granuja en la producción. Juntos son la crème de la crème, generando un enganche inmediato desde el primer segundo hasta cuando acaba la canción.

— Sofía Ariza Varela

Saske — BAR$

Es cuanto menos atrevido ponerle BAR$ a tu disco. Es, primero, una promesa. El artista se compromete a entregar eso que tanto cotiza entre los fans del rap. Por suerte, Saske sabe que si se pone la soga al cuello, es porque no se va a ahorcar, y logra entregar un trabajo que no solo cumple con traer barras, sino que las usa para contarnos su realidad. El foco está puesto en lo que vive Saske, en la España que le tocó y la relación que tiene con su ciudad, su familia, sus raíces. El rapero de Menorca es muy bueno para pintar paisajes, setear el mood de cada tema, y ambientar todo para lo que va a contar. Sean adlibs, hooks, intro, etc., Saske usa bien los recursos que tiene a su disposición para generar el clima. Como en “El Hood”, en el que arranca diciendo: “Soy un cabrón con algo que contarte / En mi pueblo hay 4500 habitantes / Un tercio curra pa’ servir a visitantes / El otro es zapatero o el tercero es traficante”. Inmediatamente, sin si quiera saber bien de dónde es, nos traslada a un pueblo gentrificado, con turistas tomando Aperol Spritz bajo una sombrilla en algún malecón, una magen tan específica como identificable. La barra siguiente lee: “Y luego a este cabrón lo llaman Saske”. Se refiere a sí mismo y reconoce que pudo lograr una carrera en el rap, sortear el destino que le esperaba. Así es todo este disco, un trabajo personalísimo donde vemos la crudeza del día a día vista con el diario del lunes que el éxito trae.

— Martín Córdova

SECCIO — EL lamento de los niños pobres

Desde que el año pasado publicara el EP C15 Dreams, muchos esperábamos un larga duración que confirmara lo que ya intuíamos: que la carrera del jienense SECCIO apunta a ser bien sólida. Es unaa trayectoria que comenzó a intensificarse en 2022 y en la que el artista asienta cada movimiento con paso firme, aunque no haya sido excesivamente constante. A pesar de que ha revelado en más de una ocasión que no fue parte de su crianza musical, su primer disco, El lamento de los niños pobres, ha dejado patente que a SECCIO el rap le corre por las venas y sabe cómo llevarlo a su máxima expresión en cada momento. Acompañado en esta ocasión por el productor Sweet Home en un mano a mano que refleja la química entre ambos, SECCIO describe a la perfección los valores de aquellos barrios en los que muchos se buscan la vida, “música de arroz y pollo para acabar comiendo trucha”. Sin alardes ni flexeos innecesarios, aquí es la música la que habla por sí misma. Quizá por ello en terreno de colaboraciones no ha buscado grandes nombres sino artistas que cada vez que cogen un micrófono suben el nivel a base de talento. Faenna y Solo K.Os le han acompañado en una aventura musical que el resto hemos disfrutado, tal y como el artista pedía, de forma proporcional a los huevos que le ha echado. Quizá porque SECCIO es ese pan duro que hace que la escena le eche cada vez más coraje. Recuerda su nombre, SECCIO, y que no se te olviden las mayúsculas.

— Julia Álvarez

El Señor del Funk — Viviendo mejor

Madurar es alcanzar el punto perfecto de desarrollo de una idea o un proyecto, es un vocablo que viene de la comida, particularmente de las frutas, cuando ya están listas para comer. Este es el momento de ‘Viviendo Mejor’, el resultado de aprendizajes y crecimiento personal de H-Ico A.K.A. Da Funkylooper A.K.A. El Señor del Funk.

Después de tres años de pausa musical, uno de los mejores beatmakers de Colombia vuelve al ruedo con una placa de casi una hora. Su repertorio va desde sonidos funk que te transportan a una playa en California pasando por instrumentales más oscuras y densas que suenan a Kennedy hasta hardcore rompecuellos, el ritmo que ha adoptado el ligero nombre de slam.

A la hora de rimar, H-Ico no se queda corto, es un álbum introspectivo que se centra en los relatos de su infancia, anécdotas de su vida, reflexiones sobre las cosas que ha tenido que pasar y las personas con las que ha logrado conectar en el rap. Por esta razón son pocas las colaboraciones, Da Terror Bundy, Mook e Indie Cutz son los DeeJays que lanzan scratches en varias canciones y destacan los rapeos de Shabby y Heavy E en par tracks.

Cierra el álbum con una canción llena de invitados de lujo: Jamblock Jr, Black Mentes, Joes y Jason de Yawar Cru.

— Julián Roncancio

Tres Coronas — Antesala

“No es necesario gritar a la hora de versar / Mejor ponte a practicar / Aprende del original”, rapea Rocca en la introducción que le da el título al nuevo álbum de Tres Coronas: Antesala. El mejor rapero de la historia de Colombia según sus colegas se desliza como una serpiente sobre una base de DJ LowCut que va creciendo a medida que se acerca la hora del concierto. Habla con experiencia y desde ahí da lecciones. Por su parte, “Bogotá” nos presenta un beat opaco de Armani Blanco y los recuerdos de PNO sobre los movimientos en El Cartucho y el Santa Fe, donde esquivaba lances y disfrutaba del sexo en exceso. Habla desde lo vivido y desde ahí reflexiona. Este nuevo álbum, el segundo de esta época de Tres Coronas luego de Nueva Era (2020), triunfa a la hora de encontrar los sonidos que mejor encajan con el estilo neoyorquino del dúo, y de demostrar que no están viviendo de recuerdos del ayer: aprovechan su experiencia, pero rapean como si esto apenas empezara.

Santiago Cembrano

Uglocaso — DPM

Da Peruvian Motherfuckers es una placa de treinta y siete minutos de rap estricto. Las rimas precisas y desafiantes que Mseco rapea tranquilamente, se combinan con las métricas y los flows de Fundamento Under, que escupe barras alternando su español nativo y el inglés que aprendió mientras vivía en California. Entre ambos está Der Enyel lanzando scratches y cuts para que no se nos olviden las reglas de este juego.

Desde la primera canción sabes de qué va esto. Son las calles de Lima, oscuras, hostiles y retadoras, ambientadas por baterías y riffs de bajo que te hacen mover el cuello, son historias de vida y street knowledge. Ellos mismos saben lo que significa este disco: “Traemos de eso que no encuentras ya en español/ es el underground con zapato e’ charol”.

La atmósfera sonora es una muestra clara del gusto y las influencias musicales del grupo: la Golden Era del rap. Cada corte te deja en el paladar el ligero recuerdo de los noventas, esto es responsabilidad, en su mayoría, de Uglocaso (pero no nos confundamos, así se llama el grupo, pero acá me refiero al alter ego de Mseco).

Las colaboraciones son pocas, pero sustanciosas. El disco en su mayoría es de los tres, pero en dos tracks tienen invitados de peso, Nichess One y Jamblock Jr en uno, y Rapper School en la otra, ambas candidatas a canciones del año.

— Julián Roncancio

Vico C — Pánico

Después de catorce años de ausencia musical, Vico C volvió con un disco de trece tracks. La manera de anunciarlo fue pateando la puerta con ‘Pregúntale a tu papá por mí’, una canción que deja el recuerdo de su música de inicios de los 2000, cuando publicó Aquel que había muerto. Este corte es un beef a la industria y las nuevas formas de hacer música, la manera disruptiva que eligió para decir estoy aquí de nuevo.

Pero el álbum va más allá de eso, es un compendio de los diferentes colores y matices que ha tenido el cantante boricua, parece como si fuese un resumen de su historia musical. Vico no solamente fue uno de los pioneros del rap en español, sino que también logró romper las barreras de su público para instalarse con fuerza en la memoria y gustos del mainstream.

‘Pánico’ es su visión del mundo musicalizada, obviamente atravesada por sus creencias religiosas. En esta placa, Vico rima sobre el amor, las relaciones personales, la familia, la fiesta y el momento actual del rap. Pero también tiene tiempo para mostrar una de sus mejores habilidades: el storytelling. Destreza que pinta en varias canciones pero que tiene un capítulo especial en ‘Sábado 14’, la secuela de su famosa ‘Viernes 13’.

Es un álbum casi que hecho en su totalidad por él. Desde la producción hasta la escritura de sus canciones. Tiene apenas tres colaboraciones; Nino Freestyle, su hijo Loupz y con Aldo, siendo ésta última la mejor de todas, un corte que pone mano a mano a dos de los mejores escritores del rap hispanohablante.

— Julián Roncancio

Yovngchimi & Dj Drama — Gangsta Grillz: Mvrda Gvng

La irrupción de YOVNGCHIMI en la escena musical ha sido una auténtica carrera de velocidad que ha alcanzado este 2023 algunos de sus puntos más álgidos hasta la fecha. La sorpresa invadió a muchos al hacerse público que YOVNGCHIMI iba a ser protagonista de una de las míticas mixtapes de DJ Drama. Así se convirtió en el primer artista latino en conseguir ese hito y nos presentó su primer álbum de estudio tras apenas dos años de carrera en los que no han faltado grandes colaboraciones con artistas como Bad Bunny, con el que gracias a “Mercedes Carota” consiguió este año su primera entrada en el HOT 100 de Billboard.

En Gangsta Grillz: Mvrda Gvng, YOVNGCHIMI nos sumerge en una narrativa que no es ajena a todo aquel que siga su música. La alta criminalidad de Santurce ha dejado huella en unas letras que, como describe el propio artista, son “una mezcla entre la cultura de calle de Puerto Rico y la de EEUU”. Una mixtape que, pese a no habernos brindado nada nuevo, tiene ciertos tintes que consiguen hacernos reconectar por momentos con aquello que un día nos hizo enamorarnos de ésto. Comandado por diablos como Rich The Kid, Hades66 o Murda Beatz, con los que sorprende lo bien que ha logrado conectar, el que trajo el Detroit a Puerto Rico ha demostrado que cuando zumba con DJ Drama es hora de que el resto recoja sus canciones. Buen tanto para YOVNGCHIMI de cara a romper barreras y dar a su carrera ese toque americano que tanto ansiaba.

— Julia Álvarez

Zábaz — Todo por su consecuencia

En Todo por su consecuencia, su segundo álbum como solista, el rapero y productor envigadeño Zábaz empieza por plantear que nadie quierse hacerse cargo de lo que causó. Por eso él rompe la inercia para examinar dónde está, qué le debe a sus aciertos y qué tan costosos fueron sus errores. Su escritura se siente honesta: pasa por los recuerdos de su barrio y peleas de adolescencia (“Radio Los Santos”) y narra postales de su carrera como rapero (“¿Cómo fue?”) con candor. Pero lo que hace de Todo por su consecuencia uno de los mejores álbumes del año va más allá de la letra: en los coros melódicos y en las instrumentales que amalgaman Envigado con California, o con Houston (“Hieres”), el líder de La Ciudad Maldita expande su alcance y advierte que solo conocemos algunos de todos sus trucos.

— Santiago Cembrano

La Zowi — La Reina Del Sur

La Reina Del Sur confirma lo que ya era evidente para algunos: La Zowi es y seguirá siendo por un buen rato la diva predilecta del bloque. No sobran los ejemplos de artistas que puedan habitar en el mundo del reguetón, rap y trap con tal naturalidad y eficacia. Este es un emblema que La Vendicion Records se ha apropiado con orgullo. Opta por una búsqueda sonora ecléctica y mantiene el discurso callejero puro, frontal y sin grises. De esta forma ha dejado una huella indeleble en el statu quo del “urbano español”, con sus dos protagonistas a la delantera: Yung Beef y La Zowi.

“Que le follen al dolor / A las heridas ponle make up”, rapea La Zowi en la introducción del disco. Deja claro que no hay espacio para sentimentalismos baratos; lo de ella es controlar el bloque e ir detrás de su bolsa de efectivo. Incluso en momentos instrumentales que abren cancha para la melancolía, como “Bobo”, La Zowi exclama con firmeza: “Ya no pienso en tí, pienso en mí, pienso en el money”. Así retrata con firmeza ese temperamento inquebrantable que conforma su personaje artístico y justifica el título de este lanzamiento.

— Rodrigo Romero

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Santiago Cembrano
Lenguaje Roto

Autor de ‘La Época del Rap de Acá’ y ‘Normas Rappa’ // Antropólogo. Escribo de rap, música y cultura.